Colegio San Damián de Molokai

Último día de la Generación 2025 en el colegio

Una mañana llena de muchas emociones vivimos este viernes 14 de noviembre en nuestra comunidad educativa San Damián de Molokai ya que fue el último día de clases de los y las estudiantes de IV medio.

 

La mañana se inició con la tradicional fotografía de curso, para luego compartir un desayuno con el Equipo Directivo del Colegio, además estuvo presente el Padre Sandro Mancilla, Superior Provincial de la Congregación de los Sagrados Corazones, Luznelda González Silva, presidenta de la Fundación Educacional Colegio San Damián de Molokai y José Luis Valdés, Delegado Provincial para la Educación SS.CC.

 

El Rector Luis Reyes señaló que el colegio prepara este desayuno como una manera de celebrar el tiempo que han estado con nosotros y que ha sido un privilegio el haber compartido estos años con ellos. El padre Rodrigo efectuó la bendición de los alimentos. María José Negrete, su profesora Jefe, les dijo que fue un regalo haber estado con ellos. “Les deseo que les vaya bien, disfruten lo que viene”. Además, niños y niñas de Kínder A y B les dedicaron una canción de despedida.

 

A continuación, iniciaron un recorrido por espacios significativos del colegio. El primero fue la Capilla, corazón de esta comunidad. En ella, el equipo pastoral les preparó un momento especial en el que se resaltó que ahora es el momento de recoger todo lo que han sembrado. Agradecieron por su permanente disponibilidad. Además, el padre Rodrigo destacó que ésta es la primera generación que egresa desde que los SS.CC. se hicieron responsables de este colegio.

 

Luego, se dirigieron al Comedor, en el que escribieron mensajes a los estudiantes de III Medio; también estuvieron en el CRA, donde la profesora Rosita Sepúlveda, les recordó que ese espacio es un lugar de encuentro y de conocimiento. “Llévense la curiosidad de aprender siempre, la capacidad de cuestionar con respeto y la convicción que el conocimiento puede transformar al mundo y a ustedes.

 

Las emociones siguieron una vez que regresaron a su sala de clases por última vez. En ella, su profesora jefe María José, les entregó un regalo y una carta de parte de los papás y mamás de los cuartinos.

 

A continuación, salieron de su sala y recorrieron los pasillos del establecimiento mientras los y las estudiantes los despedían. En ese momento, los padres y apoderados ingresaron al patio del colegio para retirar a sus hijos e hijas.