En el contexto del Mes de la Familia, nuestros niños y niñas más pequeños tuvieron un encuentro significativo con sus abuelos y abuelas. En este mes, queremos resaltar su figura que es sinónimo de experiencia, cariño, historias. El Papa Francisco los llamó “árboles frondosos, bajo los cuales los hijos y los nietos realizan sus propios nidos, aprenden el clima de la familia y experimentan la ternura de un abrazo”.
En un primer momento, en sus salas los abuelos y abuelas compartieron con ellos sus experiencias sobre cómo fue su infancia, cómo recibieron el don de la fe, cómo era su escuela, cómo se divertían. Los alumnos y alumnas recibieron estas historias y dibujaron esos recuerdos.
Luego se realizó una Liturgia en el Auditorio Pelayo Fernández, ocasión en la que se agradeció por sus vidas y la de sus familias. Se hizo memoria agradecida por cada una de las familias. Se recordó que este año el Papa Francisco celebró la Tercera Jornada Mundial de los abuelos donde destacó la importancia de las raíces de nuestros jóvenes y niños, con sus mayores. También la necesidad de una unidad entre abuelos y nietos, con los cambios culturales.
Además, se leyó el poema del padre Esteban Gumucio ss.cc. “Bienaventuranzas de los viejos” y se rezó una oración por los abuelos y las abuelas.
Con la “A” de Abuelos que me dan amor
Con la “B” de buenos en mi corazón
Con la “U” de únicos los amo yo, los amo yo
Con la “E” de entendimiento que nos da calor
Con la “L” de luz que brilla en sus ojos
Con la “O” de orgullo les seré sincero
Así los amo yo
Y a los que no están, besos al cielo.
Feliz Día Abuelos y Abuelas
