Colegio San Damián de Molokai

Jornada de Aprendizaje Cooperativo con Francisco Zariquiey

La tarde del lunes 18 de agosto se efectuó por segundo año consecutivo una Jornada de Aprendizaje Cooperativo con Francisco Zariquiey en la que estuvieron presentes profesores de nuestro colegio y del colegio Santa Teresita de Lisieux.

 

Ximena Espinoza, Coordinadora Académica señaló que con esta jornada se motiva a los docentes sobre la mejora de las prácticas educativas. “La idea es que vayan integrando otras herramientas cooperativas que les permitan mejorar el trabajo en el aula. Esto nos sirve para motivarnos, reflexionar y aplicar lo que nos están enseñando. Con ella, realizamos un reforzamiento, pero también hay nuevos aprendizajes porque específicamente solicitamos que se nos hablara sobre cómo evaluar en la estructura cooperativa”.

 

Francisco Zariquiey es uno de los maestros referentes en la metodología del aprendizaje cooperativo, competencias básicas, convivencia en contextos educativos y la gestión de la diversidad. Director del Colectivo Cinética y autor de los libros Cooperar para aprender y Cooperar para crecer de la Biblioteca de Innovación Educativa de SM.

 

“Me parece que el hecho fundamental del aprendizaje humano es que aprende el que hace, quien no hace no aprende, entonces la cooperación a través de la interacción social genera múltiples oportunidades para que los estudiantes puedan ir haciendo, pensando sobre aquellas cosas que tiene que aprender. Si los estudiantes tienen la oportunidad de hablar en pequeños grupos se maximizan esos espacios de participación y más encima, con niveles de ansiedad mucho más bajos. Un niño, una niña particularmente insegura es mucho más probable que hable y participe en un pequeño grupo que delante de toda la clase” afirmó Francisco Zariquiey en la Jornada de Aprendizaje Cooperativo.

 

Además, destacó que cobra mayor relevancia el aprendizaje cooperativo cuando hay más estudiantes por sala como sucede en nuestro colegio. “Cuanto más grande sea la sala, más improbable es que el profesor pueda darle a cada alumno aquello que necesita para aprender. Una de las cosas más bonitas que se produce en el aprendizaje cooperativo, cuando está bien implantado, es que mucho del apoyo, cuando no puede venir de un profesor, puede llegar de un compañero que tiene destrezas cooperativas”.

 

El año pasado se trabajó en diseñar tareas cooperativas y esto año, se incluyeron dos nuevas piezas: la diversidad y cómo evalúo. “A mí me parece muy importante que el profesorado entienda que no puedo evaluar bien lo que aprendió cada uno sino creo instancias de trabajo individual que lo permitan, ya no es lo que es capaz de hacer con los demás, sino lo que es capaz de hacer solo”.

 

Francisco Zariquiey planteó que el desafío de nuestra comunidad será seguir avanzando en esta línea. “Espero que, con lo visto, ahora cuando el profesorado haga una propuesta cooperativa siempre reflexione, ¿he dado todo el acceso a los alumnos?, ¿he promovido que todo el mundo se implique?, ¿soy capaz de ver lo que hace cada uno, monitorear el proceso? y en consecuencia ¿puedo evaluar el aprendizaje de cada uno de los miembros del equipo? Si el profesorado hace eso, sería un punto súper importante”.