Colegio San Damián de Molokai

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Se realizó Liturgia para los niños y niñas de Kinder

La mañana del martes 12 de diciembre se vivió un momento importante para la vida escolar de nuestros niños y niñas de Kinder cuando se efectuó la Liturgia en la que junto a Jesús dimos gracias a Dios por ellos, por sus educadoras y sus padres. Celebramos la vida, la risa y el juego que cada día se vivió a lo largo de este año. Ellos y ellas son Semilla que debe germinar y lo harán en este nuevo paso que comienzan, dejarán atrás la pre-básica y darán un paso a la educación básica.

 

Al iniciar la Liturgia, el Rector Luis Reyes Zamora se refirió a lo significativo que es este momento para nuestro colegio. “Nosotros cuando partimos trabajando con estos niños y niñas en pre kínder comenzamos un camino con ellos. Este momento nos pone muy contentos, es el inicio de una nueva vida, ellos el próximo año comienzan la educación básica, que supone grandes cambios, en ese contexto es muy importante el apoyo que cada uno de ustedes puedan darles”.

 

Durante la Liturgia, estudiantes de nuestro colegio representaron la Parábola del Sembrador. El padre Ricardo, Asesor Religioso de nuestro colegio, señaló que cada uno de los niños y niñas es como la semilla de la parábola que trae esa buena noticia y que nosotros como colegio y familia nos toca acompañar. “Nosotros somos el sembrador que riega la tierra, acompaña, respeta los procesos de los niños y niñas. Nosotros tanto el colegio como los apoderados somos sembradores, no escultores. El escultor diseña una imagen que tiene en su cabeza; en cambio, nosotros vamos acompañando su proceso”.

 

Luego se efectuó un momento de oración, en el que se rezó por nuestros estudiantes, por las familias, la oportunidad de ser padres y por el regalo de enseñar.

 

Hoy nuestros pequeños finalizaron un hermoso viaje que emprendieron de la mano formadora, acogedora y cariñosa de nuestra comunidad educativa al inicio de este año escolar. Concluyeron una etapa para comenzar el ascenso por esta larga escalera de oportunidades que brinda la educación. Como signo de este ascenso, a cada niño y niña, se les entregó un cojín con la figura de San Damián, que simboliza la espiritualidad de los Sagrados Corazones y un diploma que acredita su paso por la Pre básica.

 

La semilla Sagrados Corazones dio fruto en nuestra comunidad, que responde a los Valores institucionales. Es por esto que además, se destacaron a cada uno de los estudiantes con el valor más desarrollado durante esta etapa escolar. Los valores eran: fraternidad, respeto, responsabilidad y solidaridad. Finalizó la Liturgia, con la bendición de los papás y mamás a sus hijos e hijas; y posteriormente, con la bendición del padre Ricardo.